Los profesionales que participarán en el medio maratón de Barcelona (de izda. a dcha.): Jorge Pagola, Pilar Meler, Carlos Molina, Marc Ribó y Joan Montaner.

Redacción. Barcelona
La Unidad de Ictus del Hospital Universitario Vall d'Hebron y el grupo de investigación en enfermedades neurovasculares del Instituto de Investigación Vall d’Hebron (VHIR) se han unido para correr el Medio Maratón de Barcelona el próximo 26 de febrero, con el objetivo de recoger fondos destinados a la investigación en ictus silentes.

La idea partió de la Unidad de Ictus, dirigida por Carlos Molina, un habitual de los maratones, los medios maratones y los triatlones, en los que participa apoyando en causas benéficas. “Corriendo por el ictus queremos transmitir a la toda la sociedad, así como al entorno de los pacientes, que es fundamental trabajar para aminorar la carga social, emocional y económica que supone el problema del ictus”, comenta Molina. Y la mejor manera es seguir investigando, por eso el equipo pensó en el proyecto de investigación en ictus silentes que coordina Joan Montaner, responsable del grupo de enfermedades neurovasculares, como destinatario de la acción solidaria del medio maratón de Barcelona.

“Nos gusta correr, investigar a buen ritmo para tener resultados de manera rápida”, asegura Montaner, que junto a Molina y tres miembros más de la Unidad de Ictus trasladarán su manera de hacer habitual en el laboratorio y en las consultas del hospital al asfalto. Los cinco se han marcado el reto de correr por el ictus. “Correr es una forma de llevar una vida más sana, correr con precaución es salud”, aseguran Molina y Montanter, que invitan a correr a todos los que quieran y puedan afrontar los 20 kilómetros de los que consta la prueba por las calles de Barcelona. Pero, además, quieren contagiar su reto a todo el que quiera ayudar a la investigación en ictus silentes. Por eso, junto con la plataforma migranodearena.org, han creado la iniciativa ‘Correr por el ictus’. El esfuerzo de los cinco profesionales contribuirá a la financiación de un proyecto para ayudar a identificar las personas con alto riesgo de sufrir un ictus y poder aplicar medidas preventivas.

‘Una de cada seis personas sufrirá un ictus a lo largo de su vida, y podría ser cualquiera de nosotros’, es uno de los lemas de la iniciativa, en la que, además de Molina y Montaner, participan Jorge Pagola y Marc Ribó, neurólogos de la Unidad del Ictus, así como la enfermera Pilar Meler, coordinadora de los ensayos clínicos. Los cinco presencian cada día las consecuencias devastadoras del ictus. “Buscábamos la manera de llamar la atención sobre la importancia de los ictus silentes y relacionarlo con la práctica del deporte. Finalmente hemos encontrado el proyecto que mejor se adapta a lo que queríamos transmitir”, aseguran Molina y Montaner, quienes avanzan que correrán en más ocasiones para otros proyectos relacionados con el ictus, con el fin de seguir concienciando a la población.